Fran Dorado acusa al Ayuntamiento de no defender el patrimonio local “que
está en su mano defender” y llama a la ciudadanía a organizarse “para no
continuar perdiendo nuestra historia”. Agradece los esfuerzos de Protección
Histórica Linense “para intentar evitar el derribo”.
Ayer se produjo la demolición del edificio situado en calle Sol nº 28. Una casa burguesa
de estilo anglosajón con ladrillo visto, el único ejemplo de su tipo que quedaba en la
ciudad, el conocido como edificio Cordones. Un suceso que ha generado controversia y
críticas entre la ciudadanía. Para Izquierda Unida se trata de una “pérdida irreparable” y
que habla “de la pésima gestión del Ayuntamiento con el Plan General de Ordenación
Urbana”.
Fran Dorado, candidato de IU, reclama que el Ayuntamiento “defienda con uñas y
dientes todos aquellos edificios y lugares que por cuya importancia histórica, calidad
arquitectónica, interés cultural o belleza, deben y merecen ser conservados”. “No
podemos permitirnos el lujo de perder ni un solo edificio histórico más”, lamenta. Y
advierte que “ayer fue la casa natal de Cruz Herrera, la villa de los Carrera o la villa San
Juan, hoy el edificio Cordones, pero mañana será el Cine Imperial o el Cine Levante”.
Dorado lamenta que “el Ayuntamiento no esté siendo capaz de defender el patrimonio
que está en sus manos y en su competencia defender”. “Reformar la Plaza de Toros
con dinero europeo está muy bien, pero no olvidemos que se trata de un Bien de
Interés Cultural (BIC) y está protegido por el Estado” apunta Dorado. “Las casas
burguesas, los restos de patios de vecinos, los antiguos cines de la ciudad, la
almadraba, son competencia del Ayuntamiento proteger y promover su restauración y observamos como se muestran incapaces o desganados de hacerlo”. “A estas alturas,
con la gran conciencia social que existe sobre estos asuntos, la importancia que tiene
el patrimonio para activar el turismo y el comercio locales, que un Ayuntamiento,
continúe permitiendo cosas así, sea del color que sea, es un gran fracaso”.
Considera Fran Dorado que “la falta de voluntad del gobierno municipal la suplen la
buena voluntad de los propietarios, como se ha comprobado en restauraciones
recientes, y sobre todo la admirable labor voluntaria de asociaciones como Protección
Histórica Linense, a la que agradecemos todos sus esfuerzos para evitar el derribo de
ayer”.
Sobre el Cine Imperial, Fran Dorado recuerda que actualmente este histórico y
emblemático edificio de la ciudad no cuenta con ninguna protección “ni se la espera,
pues no está prevista protección alguna en el PGOU elaborado por La Línea 100×100,
y además se cambia el uso del suelo donde está ubicado el cine a residencial, con
objeto de construir residencias de lujo en pleno centro”. Por esa razón, llama a la
ciudadanía y a los movimientos sociales para organizarse en su defensa y en la de
otros edificios históricos. “Defender nuestro patrimonio local también es defender La Linea